02 de octubre de 2013
|
M:.
Resp:. Gr:. M:. De La Gran Log:. Del Estado de Nuevo León
Ven:.
Y Q:.H:. Felipe Cuitláhuac Martínez Alcántara presente:
Los
miembros numerarios de esta esta Logia sentimos que el pueblo masónico de Nuevo León
debe tomar una parte activa en la defensa del patrimonio de México:
El
petróleo.
La política globalizadora amenaza con
despojarnos de esta fuente de riqueza que apuntala no sólo la economía, sino la
existencia misma de México a costa de grandes sacrificios, y corriendo graves
riesgos, nuestros antepasados rescataron la industria petrolera, así como los yacimientos de crudo y las reservas de
gas, en manos, hasta marzo de 1938, de las mega corporaciones petroleras.
El
pueblo mexicano –sin distinción de clases sociales, origen étnico o creencias
religiosas— se unió con el Presidente masón don Lázaro Cárdenas del Río para
rescatar esta herencia natural que nos legó el Gran Arquitecto del Universo en
nuestros días, es evidente, los poderes globalizadores pretenden capitalizar la
debilidad económica del Estado mexicano para privatizar –en su provecho— a
Pemex.
Nosotros,
los masones de la Respetable Logia Simbólica Solidaridad 74 Humberto Ramos
Lozano, estamos convencidos de que la masonería nuevoleonesa no puede
permanecer indiferente ante este despojo, que colocaría a México ya no en una
situación de dependencia, sino, prácticamente, en el status de un anémico país
satélite sujeto a los insaciables apetitos de la cúpula de la globalización.
Pemex,
con toda su corrupción, sus fallas y carencias, es más, mucho más que una
empresa paraestatal en lo económico y financiero, Petróleos Mexicanos es el
principal causante de Hacienda y ha sido, al momento, promotor del desarrollo
nacional, pero, además, Pemex es, después de la bandera, el más importante
símbolo de México el ente petrolero público nos recuerda que fuimos capaces de
desafiar y vencer a las grandes potencias del mundo entero.
La
amenaza de privatización no es cosa menor. Tampoco aceptamos la versión
simplista de partes interesadas o mexicanos ingenuos, quienes se limitan a ver
el problema al nivel de los surtidores de combustible en las estaciones
gasolineras.
México
quedaría hipotecado si el Estado pierde el control de la industria petrolera y
todas las entidades que hizo surgir.
No
podemos vivir como nación organizada si, hasta ahora dueños del petróleo, nos
encontramos mañana en situación de depender, en todo lo relacionado con los
hidrocarburos y el gas natural, de financieros sin Dios y sin patria.
Por
ello, invitamos a nuestro Gran Maestro a aceptar nuestra iniciativa, de
organizar una marcha pública de los masones en defensa de la soberanía nacional
y el patrimonio energético.
Como
mexicanos y masones, nos sentimos obligados a defender a nuestra patria y
nuestro patrimonio, y la defensa la tenemos que hacer en la calle.
“Mañana,
tal vez—escribió Gandhi—tengamos que sentarnos ante nuestros hijos y decirles
que fuimos derrotados, pero no podremos mirarlos y decirles que viven así
porque no nos animamos a pelear”.
Gandhi
luchó y, sin derramar sangre, derrotó al que era, entonces, el imperio más
poderoso del mundo.
Nosotros
también podemos, debemos, pelear y ganar,
nuestra causa es justa, no regalemos el petróleo, que equivale a regalar
a México.
En espera de su respuesta a nuestra
iniciativa:
---------------------------------------------------- --------------------------------------------
Ven:.M:. Juan de Dios Soto Carrasco Sec:. Israel Díaz Carrizal